¿ Qué será esto del "Cibercómic" ?

Una animación pausada con ilustración y texto, una presentación de pantallas como un 'power-point', dibujos interactivos, páginas y viñetas como un cómic clásico pero adaptadas a la pantalla... Nadie tiene claro cómo deben ser los cómics digitales. Se aceptan ideas.
El director de la editorial de cómics Aleta, Joseba Basalo, explica la disyuntiva sin salirse del papel. Vamos, que sigue siendo partidario de la hoja impresa y todavía no ve negocio en 'cibercómics' ni cómics 'on line'. "Ahora hay dos maneras de presentar los cómics digitales: realizar un cómic en papel y colgarlo tal cual en la Red, o preparar el cómic pensado expresamente para Internet".

Nota: dando click en cada una de la imágenes que acompañana este post, podrán ver dos cibercomics el priemro es 'Hombres y superhombres', de Carlos Pacheco. El segundo es 'Un virus sin compasión', de Alfonso Azpiri. (A menudo, los mismos requieren la intervención del lector para seguir avanzando...)

A su vez, continúa, "dentro del segundo caso puede haber cómics con la misma estructura que los de papel pero adecuados al formato de una pantalla y luego están los experimentos un poco raros que no son tan cómic y que mezclan dibujos animados con ruiditos y movimientos". "Leerlos en la pantalla tiene que ir por estos tiros", pronostica Basalo sin mucho convencimiento.
Ante un campo tan abierto y poco definido, la compañía tecnológica Nokia y Marketingvivo han disparado a discreción y han organizado un concurso de ideas de cómo hacer un 'cibercómic', bien sea presentando un guión, dibujos o un simple argumento. De momento, como nadie se atreve a fijar los límites ni las pautas, el primer concurso 'Ideas para cyber-cómic' acepta cualquiera de las formas posibles y todavía por inventar. Ideas, ideas, necesitan ideas hasta el 26 de mayo.
Los cinco ganadores recibirán un premio, entre 3.000 y 5.000 euros, para poder materializar su idea en una obra de no más de un minuto en tiempo de lectura. Todo el proyecto está tutelado por la Asociación Española de Amigos del Cómic (AEAC) que, entre otras actividades, son los organizadores de Expocómic. Si los concursantes son capaces de manejar programas informáticos para animar su cómic, el dinero es para su bolsillo. Si no, deberán destinarlo a alguna productora que de forma a su idea. Siempre bajo la supervisión del autor, que en todo momento conservará los derechos de la obra.

La segunda fase del concurso es la difusión de las obras terminadas a través de los móviles Nokia y el portal que se ha creado para el concurso. "Nuestra intención es animar para abrir una auténtica línea de mercado con descargas de 'cibercómics' para móviles que también cuente con autores además de concursantes. La compañía [Nokia] todavía no se ha decantado, pero lo tienen en cuenta", afirma Enrique González, presidente de la AEAC.

Autores consagrados como Carlos Pacheco (ha dibujado a los X-Men para Marvel, entre otras joyas) y Alfonso Azpiri ('Lorna') han inventado su propio 'cibercómic' para animar a los concursantes. Azpiri lo entiende como una animación pausada que pide la interacción del lector, más cerca de una aventura gráfica. Pacheco lo ve como una sucesión de viñetas y dibujos estáticos que aprovechan el sonido y las luces. Como casi todos, son nuevos en esta disciplina.
Propuestas en marcha

Ajeno al concurso, Jordi Bayarri es uno de los pocos españoles que hace negocio con los cómics digitales. Hacer negocio no significa necesariamente sacar beneficios. Su iniciativa, por suscripción, encuentra clientes en EEUU ("el 80%", asegura), pero no entre los españoles, más reacios al dejar constancia de su tarjeta de crédito en la Red.
Su propuesta, 'Enchantae', es un cómic pornográfico (en Internet, el sexo siempre va un paso por delante) y su apuesta digital es hacer un cómic 'on line' más que un 'cibercómic', si es que ya se puede diferenciar categorías. Es decir, un cómic tradicional, con su estructura de página dividida en viñetas, pero ajustado al formato de la pantalla y difundido a través Internet.

Bayarri opina que "si empezamos a animar viñetas nos salimos del cómic". "Aunque hay que ser flexibles con el concepto de cómic para Internet, las pequeñas animaciones no me interesan y todavía no han pasado del experimento. Aún le queda un poco al 'cibercómic'". Paso a paso.
La potente editorial Marvel, de momento, ya cuelga algunos de sus cómics en su web para servir de anzuelo a los compradores. También intentó, sin continuidad, hacer cómics animados que reproducían con movimiento, sonidos y voz, historias publicadas en papel.

Pero siempre quedan los puristas. Aficionados que no están dispuestos a abandonar el papel. "A todo el mundo nos gusta leer cómics impresos", coinciden el editor Basalo y el autor Bayarri. "Pero es evidente el ahorro del coste de distribución y la mayor facilidad para llegar al público porque evita la saturación de material en las tiendas", asegura el editor. "El problema está en obtener beneficios por las reticencias al pago por Internet", se lamenta Basalo. Siempre queda la publicidad, pero para conseguirla se necesitan visitas y público. Donde hay negocio hay invento. ¿O es al revés?

Tomado integramente de elmundo.es (¿Alguien sabe hacer un 'cibercómic'? por Luis Cano).

Nando Cartoonista en Technorati